Desde hace unas semanas Cónchar y Cozvíjar cuentan con un punto de recogida de tapones de plástico con un diseño y un objetivo muy especiales.
Se trata de unos originales contenedores con forma de corazón que forman parte del proyecto “Tapones para una nueva vida” puesto en marcha por la Fundación SEUR.
El Ayuntamiento de Villamena ha firmado un acuerdo de colaboración con la Fundación a través del cual se reciclarán tapones de plástico con fines solidarios. En concreto, el plástico obtenido de la labor de reciclaje de los vecinos se destinará a facilitar el acceso a tratamientos médicos ortopédicos no cubiertos por la seguridad social de niños con enfermedades graves.
La Fundación SEUR ya ha conseguido ayudar a más de 171 niños y niñas a través del reciclaje de los tapones de plástico. Esta iniciativa les ha permitido entregar cerca de 1.200.000 € para ayudar a financiar tratamientos médicos y ortopedias.
Además, gracias a este proyecto y a la ayuda de todos, se han reciclado 6.542 toneladas de tapones de plástico, evitando la emisión de 8.198 toneladas de CO2, principal gas causante del cambio climático.