Faltaban cinco minutos para las doce del mediodía, momento en el que Olmo García, más conocido como “el desnudo de Graná” ha hecho acto de aparición en la explanada del Ayuntamiento para asombro de propios y extraños. Venía acompañado por los profesionales de Paravisa Digital,.
Su reconocible barba y su pelo largo han comenzado a llamar la atención de las personas que se daban cita en el lugar, sin duda el más concurrido del pueblo en viernes, día de mercadillo local. Aún estaba vestido con jersey de manga larga y pantalón cuando ha comenzado a realizar los primeros intentos de escalar los más de cinco metros de altura de la majestuosa estatua del mamut que preside la explanada. Un objetivo demasiado alto y demasiado resbaladizo para conseguirlo sin ayuda, por lo que ha sido necesario usar una escalera para alcanzar la cima y propiciar la foto que a estas horas ha corrido, como la pólvora, por los grupos de Whatsapp. Sin duda, independientemente de la variedad de opiniones que pueda suscitar tal conducta, la imagen de un homo sapiens con pelo largo y melena en cueros a lomos de un mamut lanudo resulta cuando menos icónica.
Fotos, vídeos, risas, silbidos, comentarios, insultos e incluso algún que otro aplauso, se han sucedido durante la escena. Se ha tratado, básicamente, de las mismas reacciones que rodean a este granadino cada vez que monta “su fiesta” como él le llama a este tipo de performances con las que aspira, como ha comentado en alguna ocasión, “ayudar a crear un mundo mejor”.
Diez minutos de espectáculo le han bastado para bajar de la estatua, ante la atenta mirada de los agentes de la policía local que han aguardado pacientemente a que se vistiese, “no me pueden detener porque ir desnudo por la calle es legal, hacen acto de aparición para tranquilizar a la gente que se queja, pero poco más”, asegura Olmo que explica que ha venido hasta Padul porque alguien se lo pidió hace unos meses por su cuenta de Instagram.
Una vez más la polémica está servida porque la manera de actuar de Olmo hay a quien le divierte, hay a quien le sorprende, hay a quien le hace cuestionarse si está bien o está mal, hay a quien le es indiferente (los menos) y luego están a los que les ofende sobremanera, para éstos últimos, el mediodía del viernes les ha ido nada más que regular, demasiada provocación gratuita con este calor para comenzar un fin de semana.
El protagonista “maravillado y encantado” con la experiencia, ha cogido el autobús de las 12:50h y se ha vuelto a marchar para Granada donde dentro de poco, esta vez de noche, tiene preparada “otra fiesta” que, como siempre, no va a dejar indiferente a nadie.