El pasado domingo por la tarde vecinos y vecinas de Mondújar alertaron acerca de varios destrozos que se habían llevado a cabo en el campo santo de la localidad.
Tal y como explica el alcalde de Lecrín, Pedro Titos este tipo de actos afectan a todo el mundo a ser la profanación de un lugar sagrado, “quiero pensar que se ha tratado de una gamberrada, un acto de vandalismo para hacer la gracia.”
Los particulares afectados han interpuesto denuncias ante la Guardia Civil para intentar identificar a los autores de los hechos.
Por su parte el ayuntamiento de Lecrín ha anunciado que va a tomar medidas al respecto. En primer lugar, se va a cerrar el cementerio por las noches, desde las ocho de la tarde hasta las ocho de a mañana. Además, se va a reforzar la vigilancia en la zona para intentar controlar el botellón y las reuniones que se producen alrededor del cementerio por las noches. Si persistieran este tipo de conductas desde el Ayuntamiento, se van a instalar unas cámaras de seguridad para disuadir futuros actos de vandalismo.
“Si se llega a localizar a las personas responsables de los destrozos desde el Ayuntamiento, se tomarán las acciones legales pertinentes”, explica Pedro Titos.


