Dolores García Silva, cuida la estancia del Señor de las Cuevas de Padul altruistamente desde que heredó la cueva y su suegra se lo encomendó. Nacida en Punta Umbría, Loli lleva prácticamente toda la vida residiendo en Padul junto a su familia donde es conocida por los vecinos de Padul, como “Loli, la del Señor de las Cuevas”. En la cueva, ubicada en la parte alta del pueblo, se encuentra la estampa del Señor de las Cuevas, que, según cuenta la leyenda, apareció en la tapadera de una orza, fue llevado a la iglesia y, al día siguiente, milagrosamente volvió aparecer en la cueva.
Se trata de una imagen a la que la población considera bastante milagrosa, son numerosas las personas que acuden a pedirle toda clase de favores desde hace ya varias generaciones. Es un lugar de peregrinación para estudiantes en época de exámenes y oposiciones que atesora numerosas medallas y ofrendas que llegan desde Padul y de otros muchos lugares mil sitios, y es que la sencilla estampa se ha ido convirtiendo, poco a poco, en imagen de devoción.
Loli es la encargada de limpiar y mantener la cueva altruistamente y esta mañana ha sido sorprendida por familiares y amigos, junto al programa Andalucía Directo, como agradecimiento a todos los años que lleva ofreciéndole cariño y el cuidado al Señor.
Además, se ha descubierto una placa indicativa instalada por el ayuntamiento en la puerta de la cueva y se le ha hecho entrega de un ramo de flores. Ha sido mañana cargada de emociones y sorpresas para Loli que se ha mostrado muy agradecida por el detalle junto a su venerado Señor de las Cuevas de Padul.
