A las doce del mediodía las puertas de los ayuntamientos de Dúrcal y Padul se han producido concentraciones en repulsa por el crimen cometido contra una vecina de Armilla, en la tarde ayer. La víctima, de 47 años, fue atacada por su expareja resultando herida de gravedad por arma blanca y fue trasladada al Hospital Universitario Clínico San Cecilio, donde tuvo que ser intervenida de urgencia. El intento de asesinato ocurrió en presencia de sus hijos en una agresión que tuvo lugar en la última hora del martes y está siendo investigada como un caso de violencia de género. De hecho, fueron los hijos los que avisaron de la agresión.
Durante las concentraciones se ha guardado un minuto de silencio como rechazo a este crimen, esperando su pronta recuperación, así como por todas las mujeres que ha sido asesinadas por esta causa, 1.236 desde que hay registros en 2003.

Desde el Centro de Información a la Mujer del Valle de Lecrín han aprovechado “para lanzar un mensaje de apoyo a todas mujeres que son víctimas de la violencia machista, que lo sufren en silencio, con vergüenza y culpa, para decirles que no están solas, que no las juzgamos, que ellas no son las culpables y acudan a las instituciones y servicios que les presta su Ayuntamiento donde podrán ofrecerles salidas en las que tanto ellas como sus hijos e hijas puedan vivir en paz, libres de violencia”.