Desde hace un par de meses se están llevando a cabo diferentes actuaciones en el Silo de Padul con el objetivo de darle un uso turístico y cultural al edificio. En concreto, se están adecentando, dando accesibilidad y adecuando los espacios de este singular inmueble, para que las personas que lo visiten, puedan conocer parte de la historia del pasado agrícola de Padul y la importancia económica del cereal, fuente de sustento de muchas familias de la localidad, hasta los años 80, cuando su cultivo del empezó a caer por completo en la zona.
Los trabajos, que se están desarrollando a cargo de una subvención autonómica de 60.000 €, junto a fondos propios del Ayuntamiento de Padul, permitirán dar acceso a la cota interior a través de una pasarela de acceso desde la calle. Además, se procederá a la mejora del firme y los pavimentos de la zona de pesaje, al arreglo de las carpinterías, la mejora de los acabados y al acondicionamiento interior, así como a la renovación y dotación de infraestructuras eléctricas y de abastecimiento de agua.
Tal y como ha explicado el alcalde de Padul, Manuel Villena, “desde el ayuntamiento estamos trabajando para que, una vez pase la pandemia, se retome la recepción de grupos de visitantes a Padul y queremos poder ofrecer cosas nuevas, entre ellas el Silo, un vestigio de nuestro pasado agrícola que podrá ser visitado para conocer por dentro sus almacenes y la maquinaria que se conserva intacta”.
La idea es habilitar en su interior una exposición permanente de herramientas y útiles de labranza, así como poder organizar eventos culturales aprovechando las peculiaridades de este espacio, “estamos recopilando aperos de labranza para exponer permanentemente en sus paredes y también indagando con agentes culturales de la zona para aprovechar la llamativa acústica de este espacio que puede dar muchas posibilidades a nuestros artistas», ha asegurado el alcalde que esta mañana ha visitado el edificio, junto al concejal de Servicios Municipales y Urbanismo, Paco Medina Peregrina, donde han podido comprobar in situ la complejidad de las labores que se llevan a cabo muy condicionadas por la altura y estrechez de los espacios.