/

Varias madres de Lecrín logran un comedor para sus hijos

El Ayuntamiento de Lecrín ha cedido un espacio en la Casa de la Cultura de Talará para que los menores puedan almorzar

minutos de lectura

Desde hace unos días, 12 niños y niñas de Lecrín disfrutan de un comedor en el que almorzar al salir de clase en la Casa de la Cultura de Talará. Un hecho que se ha producido gracias al empeño de varias madres y al apoyo del Ayuntamiento de Lecrín. Los padres y madres de los alumnos han trabajado de forma incansable para que sus hijos tuvieran un lugar donde comer y los padres puedan seguir con su jornada laboral.

La reivindicación del comedor al colegio ha estado sobre la mesa desde hace años, pero que nunca se ha llegado a materializar porque la delegación de Educación de la Junta de Andalucía en Granada nunca ha dado permiso para que el comedor volviera al colegio. Ratio de alumnos o el tamaño del centro han sido algunas de las razones para que la administración autonómica dijera que no durante años.

Hoy la situación es distinta. Maripaz Carmona es una de las madres que desde hace meses han estado luchando para que el comedor sea una realidad, aunque no esté dentro del centro escolar. «La idea surgió hace mucho tiempo, se movió por el AMPA, pero nunca llegó a pasar nada porque desde la Junta siempre decían que no. Y desde hace unos meses comenzamos a pedir firmas, porque creemos que las abuelas no tienen porque tener la obligación de cuidar a los niños, y es una manera de poder conciliar el trabajo de los padres», argumenta Maripaz.

Padres que en muchos casos no tienen a quien recurrir para recoger a sus hijos del colegio y que no pueden dejar su trabajo cuando termina el horario de clase. A pesar de que han conseguido el espacio, son este grupo de padres y madres los que pagan por el servicio, y aunque comentan que es caro, argumentan que ahora mismo no tienen otra solución y que a día de hoy no tienen ayudas ni bonificaciones. Desde este grupo de madres también aseguran que lucharán por otras medidas como el aula matinal o que el Liceo se haga durante todo el verano y otras épocas como las vacaciones de Navidad. «Tiene que haber actividades con monitores y campamentos para poder conciliar de verdad», dice Maripaz Carmona.

Desde el Ayuntamiento de Lecrín entienden que este tipo de medidas son importantes para los padres y madres y para todo el municipio en general, ya que este tipo de cosas es lo que hace que se fije población en el territorio. Pedro Titos, alcalde de Lecrín, asegura que «si existen este tipo de servicios la gente se queda aquí, y si no los buscarán fuera». De esta manera los padres pueden llegar más tarde a por sus hijos, con un monitora que paga el Ayuntamiento, que es la encargada de servir la comida y vigilar a los pequeños. «Como tenemos la Casa de la Cultura en Talará, hemos recolocado las actividades, instalando el comedor en el antiguo hogar del jubilado, y está dando muy buen resultado», explica el alcalde de Lecrín.

Sobre otras medidas como el aula matinal, Pedro Titos explica que aún no hay suficiente número de niños como para ponerla en marcha, pero si hay una demanda clara, «daremos el servicio como tiene que ser. Son medidas con las que siempre estaremos de acuerdo, y las haremos como sea, con esfuerzo. Son servicios para los vecinos, es algo importantísimo para que la gente no huya de nuestros pueblos».

Deja una respuesta

Your email address will not be published.

Lo último

0 0.00