El pasado 16 de diciembre este rincón del sur de Granada, situado en pleno corazón del Valle de Lecrín, brilló con luz propia e inauguró la Navidad con su III edición del Mercado y Encendido navideño. Un árbol de navidad artesanal de ocho metros de altitud, más el añadido de la estrella, un mercado de productos y piezas locales y un botón rojo que pulsó el cantante Nestior para iluminar la plaza del Barrio Alto de Pinos del Valle y mostrar el trabajo de un pueblo unido. Este año ha sido aún más especial porque los vecinos y vecinas de Pinos del Valle se han unido para elaborar un árbol de navidad único en el mundo. Un proyecto original e innovador diseñado por Isabel Díaz a base de botellas de plástico —cedidas por Aguas Lanjarón— que han tenido una segunda vida.
Desde Alauxa Cultural, asociación organizadora de este evento, estamos profundamente emocionados y agradecidos a todos los pineros y pineras que se han dejado un trocito de sí mismos en este pino. Un pino hecho de encuentro, de unión, de meriendas, tertulias, risas, nervios, ilusión y colaboración.
La Asociación de Mujeres el Juncal se ha implicado desde primera hora en la fabricación de las guirnaldas y se hizo cargo del desayuno y la merienda durante el día del mercado: chocolate y buñuelos tradicionales que endulzaron el ambiente. La estructura y el montaje desempeñado por Miguel Ortega a la cabeza ha contado con la participación de varios vecinos que se han implicado en el proceso y varias empresas han apostado por este singular proyecto como ha sido el caso de Hepoluz y de los negocios y empresas locales: el Comercial Raquel, la Carnicería David, la Cooperativa Orovalle, el bar Venecia, las farmacias locales, Transportes Mingorance, la Academia Habla Spanish UK, la Caja Rural de Granada o la Asociación Airsoft “Los Cigarrones”. Durante el día del mercado “La Media Haba” se hizo cargo de la alimentación y la bebida y los stands locales aportaron productos únicos elaborados por los vecinos y vecinas del pueblo: artesanía, repostería, platos calientes y decoración.
Un pueblo unido y completamente volcado en la celebración de este mercado que ha sido todo un referente en la comarca y a nivel provincial. Este año hemos disfrutado de gran afluencia de público y los asistentes han vibrado al son del desfile de las majorettes y del resto de actividades programadas —la visita de Papá Noel, pintacaras, tiro con arco “Valle de Lecrín”, actuación del colegio, zambomba flamenca y degustación del aceite de oliva Orovalle—.
Uno de los momentos más especiales fue la presentación realizada por Delia Molina y la intervención de Alauxa Cultural y de nuestro maestro de ceremonias Nestior, el cual nos regaló uno de sus temas más representativos: “La Teta Power”, una canción poderosa que interpretó en acústico con gran emotividad. Tras la cuenta atrás, Nestior pulsó el botón y se hizo la magia, el árbol y el resto de la plaza se iluminaron y el confeti y los fuegos artificiales estallaron en una explosión de color y alegría.
Hemos disfrutado mucho del proceso y eso se ha reflejado en el resultado. Con este proyecto se ha reforzado el sentido de identidad y de pertenencia al pueblo. Hemos conseguido crear comunidad, integrar a todas las personas que convivimos y que somos la vida de este pequeño y privilegiado enclave rural. La creatividad y el trabajo en equipo son nuestros principales motores de desarrollo y dinamización rural, a lo que se une la colaboración de la corporación local. Desde Alauxa Cultural y con la ayuda de nuestro padrino, Antonio Velázquez, vamos a seguir trabajando para potenciar la cultura y poner en valor nuestro patrimonio material e inmaterial. Tenemos tradiciones y leyendas singulares que aportan valor añadido y que contribuirán a entretejer el rico mosaico de valores que componen Pinos del Valle: paisaje, historia, monumentos, costumbres, gastronomía y sobre todo nuestra gente.