El kiosco del parque de Cozvíjar, bajo su nueva dirección, tiene el objetivo de convertirse en un lugar de encuentro de las actividades culturales para todos los públicos.
Aparte de su servicio de restauración con tapeo, raciones y meriendas, va a continuar desarrollando regularmente, como viene haciendo este verano, diferentes actividades culturales como monólogos, clases de baile, exhibiciones o actuaciones musicales y de magia.
Además, en el espacio se pueden llevar a cabo celebraciones, cumpleaños y eventos. Por otra parte, los terceros sábados de cada mes se van a organizar un mercadillo de artículos de segunda mano, artesanía y antigüedades.
Tal y como explica su nueva responsable, Irene Guzmán, “queremos ser un lugar de encuentro y de recreo para todos los vecinos y vecinos de Villamena y del resto del Valle de Lecrín”.