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Homenajean a “La tita Encarnita” la participante más veterana del Club de Lectura de la Biblioteca de Padul

Encarnita es una lectora inteligente y atenta, que anima las reuniones del grupo con su buen humor y sus variados conocimientos fruto de su dilatada experiencia

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Encarnita Arias Rejón, conocida cariñosamente como “la tita Encarnita”, recibió el pasado lunes 24 de abril en la Biblioteca municipal de Padul, un cálido homenaje, por parte de sus compañeros del club de lectura, al que lleva perteneciendo desde sus inicios en 2005.

Su compañero Juan Hidalgo describe a Encarnita como “una lectora inteligente y atenta, que anima las reuniones del grupo con su buen humor y sus variados conocimientos- fruto de su dilatada experiencia-, y entretiene con sabrosas anécdotas y enjundiosos refranes y con la evocación de antiguas canciones”

La decana del grupo, fue obsequiada con un ramo de flores y un álbum de fotos, en agradecimiento por los buenos ratos pasados con ella a lo largo de todos estos años. Tal y como explica Juan, “el  álbum recolecta una selección de fotos que fijan en el papel momentos inolvidables de los viajes literarios por diferentes lugares en los que ella participó (Ruta de don Quijote, Madrid de las Letras, Huelva de Juan Ramón, Cádiz de Alberti, Toledo, Úbeda y Baeza…), siempre la primera atendiendo las explicaciones de los guías; y siempre la primera en las excursiones a Granada,  subiendo las empinadas cuestas del Albaicín, o en  la Abadía del Sacromonte  colocándose al lado de don Andrés “de la fuente”, don Andrés el bueno,  para no perder detalle y disfrutar de los sabios conocimientos de nuestro guía, o deambulando por el Carmen de Manuel de Falla, leyendo poemas de Federico García Lorca, como muestra una de las imágenes del álbum”.

Fue una tarde memorable, “en la que sus compañeros encomiamos su arrojo y valentía para vencer las dificultades que la vida le ha ido poniendo por delante, superando los obstáculos siempre con la sonrisa y la buena disposición de ánimo”, asegura Juan.

Encarnita agradeció a sus compañeros la atención que le dedicaron y recordó que siendo una niña ya era una gran aficionada a la lectura. A ella le hubiera gustado estudiar, pero no cumplió sus deseos por causa de circunstancias familiares e históricas y por el hecho de ser mujer.  Pasados los años, en cuanto pudo, retomó su afición  por la lectura. Así, aparte de los libros que ella lee por su cuenta en su casa, desde el año 2005, ya dieciocho años, hay que sumar, por lo menos, 150 libros leídos en el club de lectura.

“¡Gracias, Encarnita, por ser como eres, por el ejemplo que recibimos de tu valor y tú perseverancia para sobreponerte a las contrariedades, gracias por tu ánimo y tu buen humor; ¡gracias, tita Encarnita!”, finaliza Juan en nombre el resto de sus compañeros.

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