El pasado sábado volvió a celebrarse el Desafío Vale, una cita que se convierte cada año en una excusa perfecta para darle la bienvenida al verano, en el calendario deportivo del Valle de Lecrín. La organización del evento se supera y crece edición tras edición. La del sábado era la octava y nuevamente se caracterizó por ser un encuentro multitudinario en un ambiente, deportivo, familiar y festivo alrededor de una buena causa.
En total fueron 1307 participante en las diferentes modalidades, BTT, senderismo, carrera por montaña, Cross, y carreras infantiles que se desarrollan de manera simultánea.
“Como siempre fue un éxito en cuanto a participación tuvimos que colgar el cartel de no quedan plazas” aseguran Lola Mochón, responsable de la gerencia de Vale quien ha querido dar las gracias a todas las personas que hicieron posible la celebración y magnífico desarrollo del Desafío “quiero dar las gracias a todos los patrocinadores que confían en nosotros y que quieren poner su marca junto a Vale, porque creen en la causa. Gracias a las familias que hacen esto posible, así como los trabajadores y a todos los voluntarios, un total de con 150, entre los que se encuentran personas con discapacidad de Vale que hacen que todo se desarrolle a las mil maravillas. Y por supuesto dar las gracias a todo el Valle, que viven el Desafío Vale como todo un acontecimiento, como la fiesta, la antesala del verano”.
A nivel deportivo el podio fue copado por atletas del Valle de Lecrín, como fue el caso de Ignacio Morón e Ikram Rharsalla los ganadores absolutos en categoría masculina y femenina respectivamente de la carrera por montaña.
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