Ruta de los Puentes: Vive una experiencia que fusiona cultura, historia, naturaleza y gastronomía

Poner en práctica tus cinco sentidos es la forma más eficaz para que recordemos siempre un momento. Y en eso consiste La Ruta de Los Puentes por el pueblo de Dúrcal

minutos de lectura

Te transportarás al pasado y conocerás uno de los motivos porqué el pueblo de Dúrcal conectaba la ciudad con la costa granadina. Y eso lo vas a vivir y experimentar a la vez que caminas por un sendero circular de 8 km aproximadamente. La Ruta de Los Puentes es un sendero guiado que te va a mostrar las diferentes caras que tiene esta localidad en un recorrido corto y placentero a la vez. Esta experiencia está creada para toda aquella persona que ame la naturaleza, tenga inquietudes por conocer la historia y la cultura que esconde el Valle de Lecrín. Una comarca de la Granada vacía que aún tiene mucho por mostrar y regalar a todo aquel que no la conoce. Es ideal para realizarla cualquier día entre semana y en cualquier momento del año. Cada estación te va aportar un color y una temperatura diferente.

La salida y la llegada se realizan desde el mismo sitio, el restaurante El Chambao El Vizco. Una vez aparcados los coches en el parking y preparados con el calzado más adecuado para pisar campo, aceras, ríos, rocas, hierro…comenzará el sendero. El sonido del río Dúrcal te acompañará en la mayor parte del trayecto. Acto seguido nos adentramos en el bosque encantado con diferentes tonalidades verdes, subimos la cuesta de La Valdesa y llegamos a uno de los monumentos más emblemáticos que tiene esta localidad, el Puente de Lata. Es difícil que no hayas escuchado hablar de él o que su diseño no te recuerde a París. En las dos primeras décadas del siglo XX la red de tranvías de Granada tuvo un gran crecimiento, realizando líneas que conectaban la ciudad con el área metropolitana. En 1920, se acordó construir un ferrocarril eléctrico desde Alhendín a Dúrcal. Y en una fase posterior estaba previsto crear un ferrocarril secundario que enlazara desde allí hasta Motril. Finalmente la conexión se realizó con un cable aéreo porque en ese tramo está el cruce del río Dúrcal. Su amplio valle fluvial requería la construcción de un viaducto alrededor de doscientos metros y por ello, se contempló la idea de reutilizar el viaducto de Gor. Por entonces ya llevaba una década abandonado. Por tanto, el puente de hierro hasta 1974 se usaba para el transporte de mercancías entre la Costa Tropical y la capital granadina. Actualmente el Puente de Lata se encuentra en perfecto estado de conservación para el uso peatonal. Ya se le han realizado algunos trabajos de conservación y es uno de los emblemas monumentales de Dúrcal.

Una vez continuamos la ruta por el pueblo conocerás una de las fábricas de aceite más antiguas de la zona que actualmente se encuentra en desuso. Al continuar el trayecto iremos descubriendo los diferentes paisajes que nos vamos a encontrar por la forma de regadío que tiene el terreno. El trazado de la acequia Mahina es la referencia para explicar porque hallaremos diferentes tipos de cultivos a lo largo del trayecto. Esta acequia fue creada en la época morisca para la distribución del agua, pasando el agua de unas hazas a otras, hasta completar el riego de todas las vegas.

Siguiendo el camino por el que nos lleva esta acequia nos adentraremos por un camino con vistas a la montaña, donde podrás visualizar el transcurso del río Dúrcal desde las alturas y a las espaldas la vista de Puente de Lata repleto de árboles a sus pies.

Al finalizar esta vía llegaremos a unas escaleras de madera señalizado como sendero Nico Molina, lo bajaremos y nos dejaremos caer hasta llegar a la poza pipa. Cruzaremos el puente que hay y comenzaremos a bajar el cauce del arroyo. La diferencia de temperatura que se percibe en este tramo es mucho más fresco y sombrío. Es una sensación muy agradable la que vivimos porque el sonido del agua te ayuda a relajarte y a conectar con tus sentidos.

¿Por qué el nombre Ruta de los Puentes? La respuesta la vas a encontrar al finalizar el trayecto cuando pases por debajo de los distintos puentes que tiene el pueblo de Dúrcal. Cada uno con unas características completamente distintas que el guía te irá contando.

Finalizaremos el camino por una explanada cubierta de vegetación hasta que llegamos de nuevo al restaurante Chambao El Vizco donde nos esperan para degustar un rico menú que hace de esta experiencia única y encantadora.

Este restaurante tiene peculiaridades que lo hacen ser único y especial. Sobre todo porque está ubicado en plena naturaleza donde su cocina fusiona la comida internacional con el diseño creativo. La amabilidad y el trato que ofrecen en su servicio es la guinda perfecta a esta experiencia que te hará volver. Durante la comida seguirás sumergido en esa historia vivida porque el enclave de este bonito lugar se encuentra justo debajo del puente de hierro.  

Deja una respuesta

Your email address will not be published.

Lo último

0 0.00